RAMON HEREDIASAN CRISTOBAL.-Los síndicos del país en su mayoría concentran todo su empeño en la solución de grandes problemas, pues estos acaparan su atención, mientras no dedican recursos para las cosas sencillas que no por esto dejan de ser importantes.
Sin embargo, las ciudades están llenas de pequeños problemas que se acumulan debido a la indiferencia con que se les trata, mientras los munícipes se acostumbran a vivir con parte de ello como algo normal y acaban por formar parte de su vida diaria.
Estas y otras consideraciones son expuestas por el precandidato a síndico del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) Julio Cesar Díaz, quien ofrece una serie de alternativas de solución al respecto.
Díaz asegura que un síndico puede y deber contribuir a elevar el nivel de desarrollo de la municipalidad, tomando una serie de acciones como son la recuperación y construcción de planteles escolares, auspiciar la construcción de clínicas rurales.
El sindico, dice Díaz, debe realizar o encabezar las campañas de vacunación contra enfermedades especificas; entre estas la proliferación del dengue, la rabia, y malaria.
Un ejecutivo municipal puede devolverle la salud a un enfermo, otorgar becas, entregar ayuda ayudas a las personas envejecientes, ayudar a las madres solteras y auxiliar ecónomamente a los discapacitados.
El alcalde de la ciudad debe construir campos deportivos y apoyar las instituciones sin fines de lucro, plantea Díaz, quien se disputará la candidatura con José Bienvenido Montas Domínguez en el proceso interno del PLD programado para llevado a cabo el 21 de noviembre.
Díaz dice que no obstante a los sádicos le es mas fácil construir un parque en la ciudad, mientras se olvidan de decenas de familias que viven en los cauces de los ríos.
“Es mJs fácil construir un monumento a la cultura, mientras existen miles de niños que no asisten a la escuela por falta de lápices y cuadernos o por falta de cupo “.
“Para un síndico es más fácil regalarle un sueldo mensual a un dirigente de su partido ,mientras ignoran a cientos de padres de familias que salen de sus casas en busca del pan para sus hijos y regresan en la noche con las manos vacías “.
“Síndicos y regidores deben usar el poder que la da la ley y autonomía que tienen sobre el uso de sus recursos, para auxiliar a los mas necesitados, sobre todo aquellos que no les llega las ayuda del gobierno central a través de sus planes sociales.
Las consideraciones de Díaz forman parte del contenido del libro de su autoría “Ayuntamiento y Municipio, aprendamos a dirigirlo" que con éxito fue puesto a circular recientemente en la Biblioteca Republica Dominicana.
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